CIDH expresa su preocupación por Reforma Judicial en México y anuncia monitoreo de su implementación
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su preocupación por la reciente reforma al Poder Judicial en México, la cual introduce la elección popular de jueces. Durante una audiencia celebrada en Washington, Andrea Pochak, relatora para México, subrayó que, si bien la democratización de la justicia es importante, esta no debe comprometer la independencia judicial, un principio fundamental del sistema interamericano.
La audiencia fue convocada tras una queja presentada por jueces y trabajadores del Poder Judicial en contra de la reforma promulgada el 15 de septiembre por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y apoyada por la actual presidenta, Claudia Sheinbaum. Los opositores a la reforma argumentan que esta medida podría permitir la intromisión del Ejecutivo en el Poder Judicial, ya que el oficialismo podría promover a sus propios candidatos para las elecciones de jueces previstas para 2025.
El Gobierno mexicano, por su parte, defiende la constitucionalidad de la reforma, afirmando que los ciudadanos deben tener el derecho de elegir a sus jueces. Señalan que la reforma fue aprobada con un amplio respaldo en el Congreso, asegurando que se ajusta a los principios democráticos del país.
Reacciones en la CIDH y el Gobierno Mexicano
Andrea Pochak enfatizó que cualquier cambio hacia un sistema más democrático en la selección de jueces debe mantener los principios de meritocracia y evitar la injerencia de otros poderes en el ámbito judicial. Advirtió que experiencias similares en otros países han demostrado riesgos de deslegitimación del sistema judicial cuando los jueces son elegidos por voto popular.
El comisionado Carlos Bernal fue aún más crítico, calificando la reforma como un “ejemplo de manual de abuso del constitucionalismo”. Señaló que un gobierno con un amplio control en las elecciones podría estar buscando consolidar su poder al proponer la elección popular de jueces, lo cual podría debilitar los contrapesos necesarios en una democracia.
Ante estas críticas, la presidenta Claudia Sheinbaum respondió en su conferencia matutina, defendiendo la soberanía de México y cuestionando la rapidez con la que la CIDH atendió esta queja. “México es un país libre, soberano e independiente, y el pueblo decide cuáles son las reformas constitucionales”, afirmó. Además, destacó que la atención expedita de la CIDH a este caso contrasta con la lentitud con la que se abordan otros asuntos en el organismo.
Monitoreo Continuo de la CIDH
La CIDH ha anunciado que seguirá de cerca la implementación de esta reforma y ha solicitado mantener un diálogo abierto con el Gobierno mexicano para garantizar que se respete la independencia judicial. A pesar de la tensión entre el Gobierno y el organismo internacional, ambas partes han expresado su disposición a continuar con el diálogo para resolver sus diferencias en torno a esta controvertida reforma.