Los choferes de la ruta 1B decepcionaron a los usuarios con sus malas prácticas, retrasos y carreras.
Después de casi dos años de inactividad, la ruta 1B volvió a circular este lunes por las calles de Saltillo. Sin embargo, lejos de ofrecer un servicio de calidad, los choferes demostraron que no han cambiado nada y que siguen haciendo lo que les da la gana.
EL DIARIO de Coahuila pudo comprobar que las unidades de la ruta 1B no cumplen con la frecuencia prometida por el Instituto Municipal del Transporte (IMT). En lugar de pasar cada ocho minutos, como se había anunciado, tardan hasta 25 minutos en llegar a las paradas. Esto provoca molestia e inconformidad entre los usuarios, que tienen que esperar mucho tiempo para abordar el transporte.
Además, los choferes siguen jugando carreras entre ellos y dejando a pasajeros sin el servicio. Esto hace que el viaje sea inseguro y peligroso para los usuarios, que se ven expuestos a accidentes y golpes. Los choferes tampoco respetan las normas de tránsito ni las señales viales, lo que aumenta el riesgo de sanciones y multas.
Las unidades de la ruta 1B son prácticamente nuevas y tienen la imagen del transporte municipal con las siglas NET y los colores rosa, verde y amarillo sobre un fondo blanco. Sin embargo, esto no es suficiente para garantizar un servicio eficiente y satisfactorio para los usuarios, que merecen un transporte digno y seguro.
La ruta 1B recorre la ciudad desde la parte sur en las colonias Teresitas y Rincón de San Antonio, hasta la Zona Centro, pasando por el bulevar Presidente Cárdenas, La Llave y Urdiñola. Por el momento, no se ha modificado su recorrido, pero podría cambiar según la demanda de los usuarios.
